- Área: 80 m²
- Año: 2018
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Fotografías:José Hevia
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La vivienda se sitúa en la planta sobreático de un edificio construido en los años setenta en el barrio de Sants de Barcelona. La construcción, posterior a la edificación original, pasa a formar parte de los añadidos típicos que rellenan las azoteas de Barcelona y que proliferaron, sobre todo, durante el mandato del alcalde Porcioles (1957-1973).
La tipología resultante en planta es singular. Absorbe dos retrocesos en planta -la sección escalonada permitía que estos aumentos de edificación pasaran inadvertidos desde la calle- pero a la vez la ocupa entera, mientras la planta tipo se divide en dos viviendas. Este hecho deriva en una planta con un núcleo de escalera en medio de la vivienda, con un patio en cada lado, y con dos terrazas cruzadas.
Este determinismo hace encarar el proyecto como un planteamiento de reforma a cuatro fachadas: no será un piso, si no una vivienda unifamiliar en altura. Y aquí una de las primeras decisiones: igualar el pavimento interior con el exterior, dando el aire de una casa de veraneo, donde el ir descalzo, el juego con el agua y la despreocupación se transmitan a los habitantes, sin prejuicios.
El ejercicio en planta resuelve, por el único punto posible, maximizar la relación entre las dos terrazas, fomentando la ventilación cruzada de un espacio bajo cubierta que sufriría sobrecalentamiento en verano. Estirando esta visual se conecta la zona de día con la zona de noche, mediante espacios mixtos.
El frontal de la terraza sur, lugar de vida, concentra la sala de estar, el comedor y la cocina, con un mobiliario que fomenta el movimiento. La terraza norte, en cambio, queda reservada a las habitaciones y un uso menos intensivo. La virtud permanece en poder elegir donde estar dependiendo del clima que se quiera, según la hora del día o la estación del año.